El mejor regalo para navidad

Voy a ser sincero. Estoy un poco confundido, a ver si esto me ayuda a acomodar un poco mis ideas...

Sé, sabemos, que en Copenhaguen (Dinamarca) se está llevando a cabo la conferencia de las Naciones Unidas para (evitar) el cambio climático. Voy a seguir siendo sincero. No estoy leyendo mucho de lo que pasa en la conferencia. Lo intenté, pero no lo estoy haciendo. Hay mucha información dando vueltas y actualizándose permanentemente, y seguirle el ritmo se me hace bastante complicado. Especialmente cuando la intención no es opinar por el simple hecho de opinar. Creo que para leer voy a esperar unos días más, y espero leer noticias alentadoras.

Aún sin saber mucho, hay algunas pocas cosas que tengo claras...

En primer lugar, muchas veces decimos que nuestro futuro está en nuestras propias manos, y que somos dueños de hacer lo que queremos de nuestras vidas, y que podemos y debemos hacernos cargo de nuestras decisiones y de nuestros actos. Hoy creo que no, que en gran parte nuestro futuro no está en nuestras manos. Y cuando hablo de futuro, hablo de futuro a mediano y largo plazo, no de nuestras próximas vacaciones. Esto que creo es un poco preocupante si lo vemos desde un punto de vista: el futuro del que estamos hablando está en manos de, por ejemplo, los líderes de Estados Unidos ¿hace falta que explique por qué? Claro que también tenemos el aporte que pueden hacer países más chicos, como el nuestro. Cristina puede elegir entre acudir a la conferencia en cuestión o hacer presencia junto a su marido en un acto en apoyo a algún dirigente sindical poderoso ¿Ustedes qué creen que va a pasar?

En segundo lugar, estoy casi seguro de que en caso de no llegar a un acuerdo respetable, no habrá segunda oportunidad. Excepto, claro, que se lleve a cabo la conferencia de "nos dimos cuenta que nos equivocamos 2010". Pero hay un mundial de fútbol por delante, así que no creo que esto pase.

Y en tercer lugar, y como decía en mi post anterior, algo se destaca por sobre todas las cosas, y es la esperanza. Aunque muchas veces no lo parezca, las personas que están allí son eso, personas. Y las personas tienen hijos, nietos, y los hacen felices como para desearles una vida sana y feliz. A sus nietos, a los hijos de sus nietos, y a los hijos de los hijos...Y tengo la esperanza de que muchos sean conscientes de que en un futuro sin acuerdo, no habrá dinero que los salve.

No necesitamos el último juguete de moda para esta Navidad. No queremos eso, Santa. No queremos un Santa, un Papá Noel, queremos muchos. Queremos un Santa de cada una de las Naciones allí presentes, y que nos traiga un único regalo, tan solo eso, un pacto, un acuerdo, una luz de esperanza aunque sea allá, al final del túnel, y aunque tengamos que caminar y trabajar mucho para alcanzarla.

¡Felices fiestas para todos!
(Imagen extraída de http://www.qpsu.org.au/climate/images/xmas.jpg)